La roca

La naturaleza crea verdaderas obras maestras, con su asombroso poder de reinventarse, de modificar su corteza, dando como resultado un cambio constante en los paisajes terrestres. En geología se dice que ninguna vista dura para siempre, lo cual esto es muy cierto; debido a los grandes cambios que pueden darse en cierto periodo de tiempo.

Los movimientos de las placas tectónicas son una manifestación de la naturaleza que forja, tuerce, eleva, y succiona partes de la corteza terrestre; generando majestuosas montañas, propiciando interminables planicies, propiciando escarpados e inspiradores cañones. 

En el actual San Francisco, EU, ocurrió un hecho muy curioso, debido al crecimiento de los niveles del agua, al finalizar la ultima era de hielo, un valle fue inundado; en el centro de la planicie había una gran montaña, erigiéndose poderosa, existiendo por millones de años. La inundación cubrió la mayor parte de la montaña, transformando su cima en una isla, en el medio de lo que ahora era una bahía.   

Mucho tiempo después, la humanidad vio con buenos ojos para construir, la reconfortante costa creada; nada como una bahía naturalmente protegida para cimentar una gran ciudad. Todo asentamiento humano necesitará una prisión tarde o temprano; producto de nuestra incapacidad para llevarnos bien entre nosotros. 

El lugar perfecto para albergar a lo peor de la sociedad, en esta historia, fue la isla, a la que llamaron Alcatraz. Durante décadas, la roca, como fue llamada, albergó a prisioneros de alto calibre, llegando a ser una prisión de máxima seguridad.  Intentos de escapar hubo varios, sin embargo, ninguno exitoso, oficialmente. 

Muchos perdieron la vida tratando de escapar de una vida de reclusión, cayendo víctimas de una de las corrientes marinas más poderosas del pacifico, propiciadas por la profundidad y forma de la topografía local. Lo notable en este asunto, no es esto, si no lo que sucederá algún día en el futuro; cuando la falla de San Andrés, que se extiende justo debajo; vuelva a hacer lo suyo, liberando incontenible energía desde la profundidad del planeta.

En ese momento el lugar más seguro para estar será precisamente Alcatraz. Una pequeña paradoja que se hará realidad durante el momento fugaz de la manifestación sísmica.

Fuerzas naturales le han otorgado una solidez impresionante a la roca, creando una verdadera fortaleza que ha resistido el paso del tiempo; que seguramente se mantendrá vigilante, poderosa; al menos hasta que la geología del planeta decida reinventarse nuevamente.

#InternaMente

#Geología

#Humanidad