Carioca, un emblema del éxito Tigre del que no se habla mucho

Rafael de Souza Pereira, mejor conocido simplemente como Rafa Carioca, se ha transformado en uno de los mejores futbolistas en la Liga MX, siendo ya un histórico de los gloriosos Tigres universitarios. Nativo de Sao Gonçalo, el mediocampista de contención cayó muy bien en el terreno de juego del balompié mexicano; siendo un estandarte de la época dorada de los felinos. 

Tiene pedigrí pambolero, debuto en Gremio, uno de los mejores equipos del fútbol brasileño; desde donde emigro al exótico balompié ruso, para enfundarse en los colores del Spartak de Moscú. En tierras de los zares, Carioca tuvo que enfrentarse a múltiples desafíos, un idioma bastante difícil de aprender, un invierno de los más brutales del planeta, una cultura mucho más fría que la amazónica; aun así, fue capaz de sobrevivir y cumplir su contrato.

El tiempo y la tierra llamaron a su corazón, razón por la cual decidió retomar su carrera en su natal Brasil; el equipo que confió en él fue el Atlético Mineiro, en ese entonces flamante campeón de la Copa Libertadores de América, de la mano de un tal Ronaldinho Gaúcho. Rafael se reencontró con su mejor versión, hecho por el cual el técnico en turno de la selección brasileña, Tite, lo convoco.

3 años defendiendo la playera del Mineiro y llegaría el momento de empacar maletas nuevamente, esta vez con un destino no tan exótico, pero sí lleno de alegrías para Rafa. El viento de cambio lo llevo a aterrizar en Nuevo León, en el más grande del estado, los poderosos Tigres de la UANL; la afición lo recibió con los brazos abiertos, y él no decepcionó; desde el principio respondió con buenas actuaciones.

Sus virtudes estaban a la vista, gran visión de campo para colocarse en el lugar adecuado, un olfato natural para la recuperación del balón, gran técnica para recibir el balón entre líneas y cederlo al compañero con mucha idea de juego. Los títulos no tardarían en llegar, Carioca tendría que destinar un lugar especial en casa donde atesorar sus muchas medallas. 

¡Viejos los cerros!

Aun así, llego un momento en que el periodismo y un segmento de la afición lo llamo viejo, muchos pensaban que ya estaba en el ocaso de su carrera y que poco o nada tendría para aportarle a los Tigres. No podían estar más equivocados; la temporada anterior estuvo a punto de salir de la institución, sin embargo, se mantuvo casi por milagro, y demostró que aún tiene mucho fútbol que dar.

Titular indiscutible, otro título a cuentas, y el ser unos de los mejores en su posición en el futbol mexicano; ¡simplemente un crack, Carioca!